Un 80% de los clientes cambiaría de marca tras una mala experiencia de atención. Esa cifra no solo asusta, sino que también deja claro que la forma en la que atiendes puede ser el punto de quiebre entre fidelizar o perder ventas.
La buena noticia es que hoy existen herramientas digitales que permiten transformar por completo el servicio al cliente. Desde plataformas de gestión de tickets como Zendesk o Freshdesk, hasta chatbots que trabajan 24/7, pasando por CRMs inteligentes que permiten respuestas personalizadas y atención omnicanal en un solo lugar.
Además, las encuestas automatizadas ayudan a detectar puntos débiles y mejorar continuamente la experiencia del cliente.
Digitalizar no es solo una mejora operativa: es una ventaja competitiva. Si aún atiendes como hace una década, estás perdiendo tiempo, dinero y reputación.
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